domingo, 4 de septiembre de 2022

 Desconocerse para conocerse mediante la escritura


Y a veces, al escribir, limpiamos todo, como si de ese modo avanzáramos hacia algún lado.

  • Alejandro Zambra


La obra literaria de Julio Cortázar se conforma, entre otros, de muchas piezas literarias escritas y publicadas durante la dictadura argentina. Una dictadura militar caracterizada por la represión, persecución y desapariciones múltiples. La literatura del autor se entiende como una forma de protesta pacífica no tan pacífica. Siendo quizás la literatura el método más certero de llegar al hombre oprimido. Mediante esta forma de expresión, se abren planos sentimentales que resultaban inexistentes: Se logra una reconstrucción de sentimientos de los cuales no se tenía noción de tener y se abarcan experiencias que sin ser contadas desde el yo somos todos nosotros, oprimidos de nuestro propio sistema.

La forma de Cortazar de retratar la realidad argentina no busca incomodar al lector, ni hacer que se sienta intimidado frente a una realidad. Por el contrario, apela a llenar los espacios que se daban por perdidos y resultaban vacíos, entregando una suerte de complicidad entre los protagonistas -sus realidades tan detalladamente descritas- y el lector.


La opresión se combate a través de la escritura, y es entonces que Cortázar inicia su guerrilla al escribir. El lugar en que se consagra a la escritura se le otorga al arte en Graffiti: un cuento que relata la necesidad de una mujer de hallar a alguien que la comprenda, que sufra su misma realidad y la ayude a sentir que no combate sola. Se dedica a hacer graffitis en la ciudad, los cuales sobreviven hasta que son inevitablemente borrados. Su arte callejero es, en realidad, más que solo arte, la forma de querer encontrar el compañerismo en un mundo donde tiene que librar la lucha contra la represión política de la dictadura argentina. Esta mujer encontraba en el arte un espacio donde, como bien dice el narrador, “casi cabía la esperanza”. Cuando siente que alguien le responde y que comparte las mismas aspiraciones en esa sociedad ya dada por vencida, es que sabe que hay un objetivo en común, algo así como una pasión que haga valioso vivir y por la que valga la pena hacer graffitis. Es precisamente este el objetivo de la misma literatura: Consagrar la lucha y manifestar un discurso común, tanto en la escritura del cuento como en la trama del mismo; La necesidad de oponerse, rebelarse y vencer.


En realidad, escribir Graffiti es, al igual que el mismo acto de graffitear una muralla, una manera de intentar progresar y batallar la realidad del día a día. La escritura es el proceso por el cual nos separamos levemente de nosotros mismos hasta encontrar un plano nuevo. Nos desconocemos para conocernos. Parte de escribir es hallar lo más recóndito del individuo y plasmarlo, soltarlo. Retratar una realidad es evidenciarla y desmitificarla, comprenderla desde un otro y difundirla como método de búsqueda de nuevos compañeros y abrir la cabeza de quien tenemos al lado. Para esto, debemos alejarnos de nosotros y escribir desde una distancia que permita mostrar de forma acertada la crisis, para luego encontrarnos frente a ella y sincerarnos en la plena luz de nuestra verdad. Cuando el autor escribe Graffiti este no es más que la protagonista buscando un cómplice en el lector como ella lo hizo en otro artista. Se escribe desde la propia experiencia y más que nada desde la literatura como una necesidad. 


La idea de la literatura como una necesidad se vuelve evidente cuando tenemos algo que limpiar y de lo que salir. Para Cortazar una dictadura que combatir y, traido a nuestra contemporaneidad, para nosotros una realidad política, social o la ineludible sentimentalidad, lugares de donde queremos escapar o que necesitamos limpiar. Comprender la existencia mediante la literatura es la forma más verídica de hacerlo. Sin ser nuestro plano real es aquel en que somos genuinamente libres y no categorizados. El autor argentino de los 70 deja de ser un oprimido más y es la voz de una generación o sociedad. La artista que busca compañía no es alguien que raya una pared, toma su posición de opositora al sufrimiento. Nosotros mismos dejamos de ubicarnos en una categoría inexorable y aterrizamos en la que nos pertenece: Nos conocemos.

Es así como la literatura de Cortázar es una forma de metaficción para limpiar sin olvidar,avanzar hacía algún lado.


Emilia Bahrs


viernes, 2 de septiembre de 2022

La Patria fraccionando la razón y abriendo al compromiso

 


La Patria fraccionando la razón y abriendo al compromiso


Mario Benedetti fue un muy reconocido escritor uruguayo que se caracterizó por su escritura profunda y detallada capaz de transmitir sensaciones e ideas a quien leyera una de sus obras. Sus obras se caracterizaron por ser una escritura altamente política, que buscaba retratar vivencias y sentimientos por los que él pasó o sintió importante de retratar. 

El vivió el exilio en México después de la llegada de una dictadura civico-militar a Uruguay, en los años 1973 a 1985 liderados por Juan María Bordaberry.

Podemos ver que este hecho marcó bastante su escribir viendo la obra "Hombre preso que mira a su hijo", donde vemos a un padre que le relata a su hijo como vive la tortura al ser un opositor del régimen de turno, y como esto le trae problemas al no hablar, y resulta en torturas que el mismo relata en la obra.

Podemos ver que este parte mencionando que las cosas han cambiado a su alrededor, que lo que antes funcionaba ahora ya no mas, que en lo que el confiaba ya no más, y muestra una clara nostalgia a esos tiempos pasados donde las cosas bajo su visión funcionaban como deberían; en estos puntos hace una especial mención a que la patria está dentro de estos factores que dejó de funcionar bien, y que el idealismo de que este aún es algo en lo que se puede confiar ya quedó atrás, y que hay que adaptarse a este nuevo camino al que nos lleva, donde (citando al texto) "que muerte era tan solo grave o llana, y cárcel por suerte una palabra esdrújula", mencionando claramente que factores o hechos que antes solo escuchaban o se imaginaban como la muerte o la cárcel, pasaban a ser una realidad especialmente para opositores.

Profundizando en el tema de la patria, Benedetti nos muestra como esta dejó de funcionar y a lo que esto nos abrió camino (la persecución, la muerte y la cárcel), y consecuentemente nos muestra como esta termina por abrir un espacio donde la razón no es escuchada, y sino más bien es desechada, y se le abre paso a la violencia desenfrenada y cruda donde se persigue al que piensa distinto (esto basándonos en cosas que dice más adelante), y como el dejo de funcionamiento de esta misma, termina por producir la situación que está describiendo, la tortura de él mismo.

A medida que vamos leyendo podemos notar como la crueldad del relato va aumentando, como este cada vez va recurriendo más a los detalles y como de alguna manera lo lleva a consiente o inconscientemente a buscar cierta comprensión de parte de su hijo, con quien él queda corto de momentos, y al cual le trata de presentar esta situación para que comprenda el porqué él hace estas cosas, y los costos que esta dispuesto a asumir pese a que los beneficios no los ve ni de cerca él o su familia, si no que el grupo al que él pertenece.

Teniendo esto en cuenta vemos como la derrota de la patria como él la entiende abre paso a una persecución de ideales y movimientos que perfectamente podían convivir y expresarse hasta antes de la llegada de la dictadura, por ende vemos una perdida de la razón de parte de quienes tienen el poder, como es el estado mismo, el cual posee un poder político y armamentistico, con el cual ninguno de estos equipos revolucionaros puede pelear, y que lo lleva finalmente a probar este compromiso que el adquirió con este grupo al que pertenece, y en donde el llega a estar dispuesto a arriesgar su vida, con tal de expresar sus ideale; y finalmente nos llevan a una búsqueda del padre de la comprensión de su hijo.


Cristóbal Fugueroa

  Desconocerse para conocerse mediante la escritura Y a veces, al escribir, limpiamos todo, como si de ese modo avanzáramos hacia algún lado...