lunes, 5 de octubre de 2020

Benedetti te llena de realidad y vivencias

 Benedetti te llena de realidad y vivencias


Mario Benedetti fue un escritor, poeta, dramaturgo y periodista uruguayo, nacido en 1920, integrante de la Generación del 45. Su gran producción literaria incluyó más de ochenta libros, algunos de los cuales fueron traducidos a más de veinte idiomas. En su testamento dejó creada la Fundación Mario Benedetti para preservar su obra y apoyar la literatura y la lucha por los derechos humanos, en especial el esclarecimiento del paradero de los detenidos desaparecidos en Uruguay. Era una persona que tenía mucho para contar, lleno de experiencias y anécdotas. Vivió en época de dictadura, fue exiliado y regresó 10 años más tarde a Uruguay. En sus obras suele enfocarse bastante en lo que se vive en momentos de dictadura y crisis, normalmente emplea personajes de torturado y torturador para enfatizar un poco en ambas perspectivas y mostrar lo que ocurría en esa época, así lo plasma en su Novela Pedro y el Capitán. Pedro y el Capitán es el diálogo entre los personajes Pedro, un preso político que es torturado, y el capitán, el torturador, inspirado en los procesos de tortura existentes durante las dictaduras del Cono Sur, aunque en la obra nunca se dice certeramente dónde transcurre. Más allá de la denuncia contra la represión militar y los métodos de tortura, la obra plantea temas de carácter universal, como la libertad, la dignidad, el valor de la vida, las creencias. En la obra el intento de comprensión de una de las manifestaciones de la violencia engendrada por sistemas políticos represivos, el tenso diálogo desarrollado en la sala de interrogaciones entre víctima y victimario, conforman una verdadera radiografía dramática de la psicología de un torturador. La obra se compone de cuatro actos en los que no se percibe el enfrentamiento de un monstruo y un santo, sino de dos hombres, dos seres de carne y hueso, ambos con profundas zonas de vulnerabilidad y de resistencia. La distancia que los separa es, sobre todo, ideológica y quizá ahí es donde reside la clave de otras diferencias, que abarcan temas tan sensibles como la moral, el ánimo, el dolor humano, el coraje y la cobardía, la poca o mucha capacidad de sacrificio, la brecha entre la traición y libertad. La obra busca hallar respuestas al por qué y mediante qué proceso, un ser normal puede convertirse en un torturador. A pesar de que el tema de la obra gira en torno a la tortura, esta no es mostrada como hecho físico al ser representada, puesto que, como el propio Benedetti advierte “en el teatro se convierte en una agresión demasiado directa al espectador y, en consecuencia, pierde mucho de su posibilidad removedora. En cambio, cuando la tortura es una presencia infamante, pero indirecta, el espectador mantiene una mayor objetividad, esencial para juzgar cualquier proceso de degradación del ser humano”. Esta obra es una de esas que producen un remezón, un cambio en quienes la leen o presencian. El diálogo entre un sujeto que apreciamos como insensible, duro e inhumano, y otro que es una víctima, un hombre valiente que ha caído por sus convicciones e ideologías, son conceptos demasiado obvios para ser tratados, en cambio indagar sobre aquellas conversaciones que todos sabemos existen, pero que desconocemos cómo se producen, nos ponen al frente una obra completamente novedosa e intrigante. Después de habernos adentrado más en lo que fue Benedetti y la obra me gustaría dar mi opinión. Me parece que es una obra muy interesante y en general lo que hace el propio autor es bastante llamativo, utiliza una forma auténtica, dialéctica y tomando varias perspectivas de la Historia y de los hechos, lo que la vuelve dinámica. Además lo cuenta todo como él lo vivió, ya sea de forma cruda, insensible o amable, sin tapujos. Podría concluirse que Pedro y el Capitán juega, de cierta forma, el rol de un documento histórico en Latinoamérica, ya que muestra una de las posibles relaciones entabladas entre víctimas y victimarios, o al menos la idea de que algo parecido pueda haber ocurrido en los distintos procesos de tortura vividos en Sudamérica. Jamás conoceremos los tratos, las conversaciones y las vivencias que experimentan un torturador y su víctima, a menos que tengamos la desgracia de haberlo experimentado, pero Benedetti nos demuestra, dejando a un lado su postura política y el sufrimiento por el que atravesó con su exilio, que detrás de cada rostro, de cada acto o ejercicio, por muy aberrante que este sea, siempre existe un ser humano, y su condición no podrá cambiarse por las circunstancias. Lamentablemente, una vez que se realiza un crimen, el tiempo no puede dar marcha atrás, a pesar del arrepentimiento que, en ocasiones como en la historia de Pedro y el Capitán, resulta ser la peor de las torturas. Un escritor extremadamente interesante que nos dejó muchísimo para leer e investigar, realmente una leyenda literaria.


Juan Pablo Burgos









No hay comentarios:

Publicar un comentario

  Desconocerse para conocerse mediante la escritura Y a veces, al escribir, limpiamos todo, como si de ese modo avanzáramos hacia algún lado...